Que lejos quedó diciembre del 2019 cuando recién escuchábamos los primeros comentarios acerca de un virus, en China, que se habría generado por una persona que comió una sopa de murciélago en mal estado. Hoy, dos años después, las consecuencias siguen siendo devastadoras y cuando nos ilusionamos que puede estar cerca el final, recrudece y rompe récords. ¿Hasta cuándo Covid?

Sin dudas, el dato de que Estados Unidos registró un 4 de enero del 2022, dos años después, el récord de casos diarios de todo el mundo desde el comienzo de la pandemia, es una información que sorprende a esta altura, por el paso del tiempo. Pero no es ilógico desde el punto de vista de que el crecimiento de la variante Ómicron está generando ese tipo de números en todo el mundo.

Fueron 1.017.376 de casos diarios y 1.643 los fallecidos para que el territorio norteamericano rompa todos sus récords. Con estos números el total es de más de 56 millones de casos y por encima de los 800 mil fallecidos desde el inicio de la pandemia. Lo que más preocupa actualmente a las autoridades estadounidenses es el bajo nivel de vacunación, no por no contar con vacunas disponibles, sino por el alto índice de personas que no desean vacunarse. Con esquema completo no alcanza el 65% de la población, mientras que apenas el 20% ha recibido la dosis de refuerzo.

España, Francia, Reino Unido, Italia, Portugal y Grecia también vienen rompiendo sus marcas máximas de casos desde el comienzo de la pandemia y hasta Argentina lo padece en los últimos días, con un registro superior a los 50 mil casos y que según las autoridades sería aún mayor en los próximos días cuando se comiencen a contabilizar los datos de las fiestas.

Esta situación tiene nombre y apellido, «Ómicron». La variante más contagiosa hasta el momento es la que está causando estragos en todo el planeta y pone en jaque otra vez a las autoridades sanitarias que deben tomar decisiones poco felices para la población. Lo positivo es que la vacunación está dando resultados en lo que respecta a fallecimientos, y el número es bajo en este sentido con respecto a los contagios, lo que demuestra el efecto de las inoculaciones.

A pesar de ello, hay una gran parte de la población que aún no está vacunada, por escases de vacunas (en el caso de territorios como los africanos) y por fuertes movimientos antivacunas (como el ejemplo estadounidense). Eso es lo que está dificultando mucho más la batalla contra el virus y principalmente, lograr que desciendan aún mas fuerte los casos de internaciones graves y fallecidos.

Los especialistas aseguran que Ómicron puede ser el último o uno de los últimos intentos del virus por sobrevivir y estaría anunciándose de esta forma el final de la pandemia, aunque también circulan rumores de nuevas cepas que podrían estar apareciendo en el mundo. Nadie tiene la verdad ni la palabra justa, esa es una de las enseñanzas que nos deja este período pandémico y lo único que podemos hacer es preguntarnos ¿hasta cuándo Covid?