Un análisis de 5,3 millones de personas señala que el riesgo cardiovascular se equipara al de los no fumadores en 25 años para quienes tuvieron un alto consumo de cigarrillos.
Un estudio reciente llevado a cabo en Corea del Sur, publicado en la revista JAMA, demostró que el tiempo necesario para que los exfumadores igualen los niveles de riesgo cardiovascular de los no fumadores depende de su exposición acumulada al tabaco. Para los considerados “fumadores empedernidos”, con un consumo de más de 8 paquetes-año, el riesgo de infarto o accidente cerebrovascular (ACV) se normaliza recién después de 25 años de dejar el cigarrillo.
Por el contrario, quienes abandonan el hábito con menor exposición al tabaco pueden reducir su riesgo cardiovascular en tan solo una década, alcanzando niveles similares a quienes nunca fumaron. Según los especialistas, estos hallazgos subrayan la importancia de dejar el cigarrillo lo antes posible, dado que el tabaquismo es un factor de riesgo prevenible que enferma al corazón y red.