Martín Fabio, más conocido como «El Mono» de Kapanga, estuvo en los micrófonos de Cuatro Giros Radio por Late 93.1, en los que habló sobre sus orígenes en la música, su recorrido, las experiencias televisivas y hasta las vinculaciones de su música con algunos aspectos de la política argentina.
«Usamos la ironía, el humor ácido. Éramos unos pibes que lo único que queríamos hacer era tocar y mostrar lo que hacíamos. Hoy nos encontramos 28 años después habiéndole puesto canciones en los oídos a la gente. Kapanga es energía, transmite eso», recuerda el Mono en relación a los orígenes de la banda.
Además, se refirió a la vinculación que se da entre la música y las problemáticas sociales que afronta, por ejemplo, la Argentina. «Del segundo disco de Kapanga tiene mucho de lo que hoy está pasando en la realidad. O Bisabuelo, que es de Botánica, de 2002, que trata sobre el tema de los pibes que se van del país. Hoy la historia medio que se vuelve a repetir. No hay cámaras apuntando a las embajadas pero hay pibes que se están yendo. Se vuelve a repetir, no se si aprendimos mucho»
«La alegría la tomamos como una forma de resistencia. Sentimos que resistimos con nuestra música. Sobrevivimos a Menem, a De La Rúa, los 6 presidentes en una semana, a Duhalde. Somos muy pocos los que persisten en el sueño y lo logran, para la cantidad de bandas que hay en el país, que hay una por manzana» al referenciar las dificultades que afrontan los que buscan trascender con sus sueños en la música a pesar de los problemas de contexto que afectan directamente al esfuerzo realizado.
Martín se refirió al disco que les dio la posibilidad de hacer el quiebre en su carrera y luego, la importancia de seguir luchándola para poder mantenerse vigentes: «Este disco nos dio muchas satisfacciones. Fue la punta de flecha de una carrera que ninguno de nosotros imaginaba. Nosotros nos la rebuscamos durante 28 años para seguir adelante y seguir haciendo lo que nos gusta».
Con respecto al desarrollo de nuevas formas de música y el posicionamiento de los artistas modernos en comparación con su experiencia personal de los orígenes, el Mono aseguró: «Chicos que hacen trap, la vieron y la hicieron perfecto. ¡Ojalá me hubiera pasado a mi! Hay que dejarlos correr y ver en unos años en donde quedó este movimiento que vino a patear el tablero. Yo no digo que sean modas, pero sí que es el momento de ellos. Tienen una gran unión entre ellos, que es algo que no tuvimos nosotros. Son un conglomerado de pibes que la tienen re clara».
«Tengo un hijo de 21 años, que es rockero. Me mostró a Wynona Ryder, y dije ‘fua’ estos pibes si que son rock. Siguen saliendo artistas de rock. El rock está más vivo que nunca. Podes tener un montón de seguidores y hacer un show y que vayan 20. Esos palos se los van a comer un montón. Hoy cambió la forma de escuchar. Es muy efímero, si no lo enganchaste al primer estribillo ya pasan a otra canción. Nuestras historias de Instagram eran pegar afiches en la calle o panfletear» aseguró sobre la situación actual del rock y cómo son las nuevas formas de la música y su forma de darse a conocer.
No podía dejar de lado su experiencia en Masterchef, un reality que cambió por completo la imagen que muchos tenían de él, viendo mucho de lo individual más allá del músico. «Yo a la tele fui varias veces de invitado, a hablar de lo mío. Masterchef fue otra cosa, el que me conocía como el Mono de Kapanga por ahí descubrió a Martín. Todos los que prendemos una hornalla nos sentimos vulnerables cuando cocinamos».