Apple es comúnmente conocida por el alto precio de sus dispositivos y su agresiva pero resultona estrategia de marketing. Además, otro de los pilares de la marca es su promesa de brindar privacidad en todo momento al usuario, pero ahora podría estar en duda.
Durante años, la compañía californiana se ha abrazado a la privacidad como su principal argumento de venta y diferenciación con el resto de dispositivos del mercado, asegurando que los datos de los usuarios están protegidos dentro de su ecosistema en todo momento.
Y claro, cuando haces una promesa tan ambiciosa, el más mínimo desliz puede resultar en una crisis mediática que apenas tiene precedentes y que está haciendo tambalear toda la estructura de la compañía. Sobre todo, este problema se hace más notable cuando la propia Apple no cumple al 100 % con los estándares de privacidad que prometen.
En 2021 ya se hicieron públicos varios problemas que tenían que ver con las políticas de recopilación y datos compartidos de los usuarios. Aunque siempre han sido mucho más restrictivos en esta materia en comparación con algunos de sus competidores como Google, el hecho de que Apple se muestre ajena al negocio de la publicidad no quiere decir que no se esté dejando ver por esos terrenos de vez en cuando, poniendo es riesgo a sus usuarios.
De hecho, esto quedó en evidencia recientemente, cuando la compañía tuvo que pagar 95 millones de dólares para poner fin a una demanda colectiva que acusaba a Siri de espiar de manera no consensuada conversaciones con el fin de mostrar anuncios personalizados y vender esas escuchas a los anunciantes.