En una entrevista exclusiva, conversamos con la talentosa actriz Mónica Villa en Cuatro Giros Radio, junto a Seba y Sol Alonso, quien nos brindó interesantes reflexiones sobre su experiencia en la docencia, su participación en la película «La extorsión» y su visión sobre el cine argentino, donde nos mostró su versatilidad y pasión por las artes escénicas.
Al consultarle sobre su incursión en la docencia teatral, Mónica nos comenta que dar clases de teatro no es tarea fácil, y en estos tiempos difíciles, se vuelve aún más desafiante. Sin embargo, destaca que la parte docente le encanta y ha desarrollado seminarios tanto en Argentina como en España y China, enfocados en el teatro argentino y latinoamericano. Mónica encuentra satisfacción tanto en formar actores como en formar espectadores, ya que considera apasionante enseñarles a observar y diferenciar la calidad actoral.
«Creo que lo que les enseño es a confiar en ellos, a abrir, a descubrir su yo creativo, que es algo bastante aplastado en los últimos 40 años de historia aquí. Hay una creatividad que no se trabaja actualmente y los voy llevando hacia eso, a confiar en ellos, a tenerse fe en que pueden y pueden» aseguró Mónica
Al hablar sobre su experiencia en la película «La extorsión», Mónica nos contó que fue una vivencia interesante producto de los excelentes compañeros de reparto y la fantástica producción. Destaca la diferencia que sintió en esta producción, proveniente de la productora de Campanella, en comparación con el cine independiente argentino al que está acostumbrada. Mónica menciona el mayor respaldo económico y recursos disponibles en este tipo de producciones. Al momento de destacar a sus compañeros, Mónica destacó a todos, aunque referenció a Carlos Portaluppi, a quien conoce desde hace años y considera un excelente actor y a Julieta Vallina, a quien quiso recordar, lamentando su pérdida.
En relación a la valoración del cine argentino, Mónica, quien fue parte de uno de los grandes éxitos que tuvo la industria nacional, como Esperando la Carrosa, expresó su descontento con la falta de apoyo y difusión que muchas veces enfrenta. Aunque reconoce que producciones como «La extorsión», al ser coproducciones con grandes estudios, gozan de mayor visibilidad, destaca que la mayoría del cine argentino independiente se enfrenta a desafíos para estrenar y difundir sus películas. Mónica considera que el público argentino disfruta del cine nacional y lamenta la dificultad que los jóvenes actores enfrentan para destacarse en un panorama dominado por producciones extranjeras y plataformas digitales.
«Cuesta mucho y cuesta mucho estrenar cine argentino y cuesta mucho difundirlo y es una pena porque a la gente le gusta el cine argentino al público nuestro, le gusta ver a sus actores, le gustan sus directores y la gente joven tiene que luchar a brazo partido para distinguirse de argentinos está bien, entiendo que hay otros, hay plataformas, hay internet, hay todo lo que me quieras contar pero también es lindo ir al cine, es un ritual hermoso ir»
El éxito y la crítica son temas que no pasan desapercibidos en la vida de un actor, y Mónica comparte su enfoque personal al respecto. Ella no coloca el éxito en el centro de su existencia, sino que se enfoca en sus valores y en seguir siendo fiel a sí misma. Aunque disfruta del reconocimiento que puede llegar con un éxito, entiende que es efímero y no define su valía como persona ni como actriz. Del mismo modo, ha aprendido a manejar las críticas, reconociendo que no todos pueden apreciar su trabajo y que eso es algo natural debido a la diversidad de gustos.
En relación a la crítica, aseguró que es es exactamente igual al éxito y recordó «en mis primeros años de carrera me dolía cuando a algún crítico no le gustaba mi trabajo. Ahora, bueno, lo tomo como parte del oficio y entiendo que, tanto al crítico como a mucha gente, puede no gustarle mi trabajo. Y tienen derecho a que no les guste. Porque si se trata de gustos, no los puedo obligar. Yo hago las cosas lo mejor que puedo. Pero si no les gusta, bueno, está bien, no les gustó. Suena tan simple y a veces tan difícil. Para muchos por fuera de la actuación, es difícil porque creo que la vida se genera con mucha paz».